Para la defensa de las murallas de la ciudad utilizaron un arma llamada "Fuego griego" que combinando diversos elementos químicos conseguía seguir ardiendo incluso después de que le echaran agua, lo que lo convertía en muy útil al atacar con unos sifones a presión a los barcos enemigos y estructuras de asedio de madera.
"El fuego se realiza con las siguientes materias. Del pino y de ciertos árboles de hoja perenne se obtiene resina inflamable. Se machaca con sulfuro y se pone en tubos de caña y se sopla por parte de hombres utilizando su violento y continuo soplido. Entonces de esta manera la materia alcanza el fuego de la punta y cae como un fiero torbellino en la cara de los enemigos." Descrito por la princesa bizantina Ana Commeno en la Alexiada.
PD: No he podido evitar acordarme del Fuego Valyrio de la maravillosa serie Canción de Hielo y Fuego.
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